En este artículo, mostramos cómo se desarrolla la biometría facial o reconocimiento facial biométrico en los procesos de pago y sus características además de las ventajas y regulación del pago biométrico.
La biometría facial: ¿Qué es?
Antes de profundizar en el tema de la biometría facial, es necesario dar unas pinceladas básicas sobre los conceptos que vamos a tratar.
La biometría facial o reconocimiento facial biométrico permite determinar la identidad de una persona a través de su rostro. No es una tecnología intrusiva a diferencia de otro tipo de biometrías del mercado, como puede ser la huella dactilar.
Se está convirtiendo en la opción preferida por las empresas, tanto como modelo de seguridad para los clientes como por la mejora en la experiencia de usuario.
Existe mucho ruido en el mercado de la identificación con respecto a las distintas soluciones y respecto a lo que la regulación permite, por tanto, debemos explicar los requisitos fundamentales de la misma así como las ventajas de utilizar este mecanismo.
Con esta información, seremos capaces de valorar objetivamente las soluciones que tenemos a nuestra disposición y elegir la más conveniente para nuestro negocio.
La biometría facial y su regulación
Es importante mencionar que en el sector financiero, los selfies o las fotos no cumplen con la normativa legal de prevención de blanqueo de capitales y financiación del terrorismo (legislación mundial KYC AML) debido a su bajo grado de seguridad.
No obstante, desde la entrada en vigor a finales de 2018 de la nueva Directiva AML5 y junto con el Reglamento eIDAS, la biometría facial respaldada por procesos de video identificación sí se encuentra aceptada.
Con ello, se produce una homogenización del Mercado Digital Europeo con 508 millones de potenciales clientes.
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¿En qué consiste la biometría facial?
El reconocimiento facial biométrico se está utilizando en diferentes sectores del mercado como una tecnología novedosa, siendo una alternativa más segura que las contraseñas convencionales.
Asimismo, la cobertura de la tecnología biométrica facial y la adaptación a los distintos canales es muy superior a la de otras biometrías, siendo óptima para el canal móvil, el web y el presencial.
Ventajas del reconocimiento biométrico facial
Sus principales ventajas son las siguientes:
- Facilidad de uso.
- Las características físicas de un rostro resultan casi imposibles de falsificar.
- Integridad del servicio, pudiendo utilizarlo en cualquier momento sin fricciones.
- La biometría facial tiene una estrategia omnicanal ya que se puede utilizar desde cualquier dispositivo electrónico que contenga una cámara.
- Efectividad en tiempo real.
Características y resultados de la biometría facial
La biometría facial se está convirtiendo en parte básica de las estrategias multi-factor del sector Fintech, ya que mejora tanto la experiencia del cliente como la seguridad que siente éste al realizar cualquier proceso.
Un proceso de autenticación a través de la biometría facial debe ofrece una serie de características generales para asegurar unos resultados óptimos:
1. La universalidad de la solución
Es esencial que el proceso pueda tener lugar en cualquier país, a través de cualquier canal y desde cualquier tipo de dispositivo, siempre que tenga una cámara.
2. La detección de vida del cliente
Una imagen por sí sola no permite identificar si una persona está viva, por tanto, es necesario un proceso en streaming con el que asegurar que la persona es quien dice ser en ese momento, que está viva y que no está siendo coaccionada. De ahí también la importancia de guardar una prueba en vídeo del proceso.
3. El control del entorno
La calidad del entorno debe ser controlada en tiempo real para garantizar que el proceso validado ha cumplido con los requisitos necesarios. Aquí incluimos todas las variables externas como la luminosidad, la calidad de la propia cámara y también de la red que el cliente está utilizando.
4. La conveniencia del proceso de registro
La complejidad del proceso de registro es muy baja, ya que el usuario no tiene la necesidad de interactuar en un proceso que es automático. Esta es una gran diferencia con respecto a otro tipo de biometrías como la dactilar, la voz o la retina.
Casos de uso del reconocimiento facial biométrico
El reconocimiento facial biométrico, como sistema de autenticación, se está implantando en muchos de los procesos que realizamos en nuestro día a día como, por ejemplo, pago con reconocimiento facial, contratar productos en bancos, accesos al lugar de trabajo o a múltiples instalaciones.
No obstante, si nos centramos en los procesos de pago con reconocimiento facial, los principales son los siguientes:
- Aceptar pagos y compras online: Comprar y pagar en segundos desde donde quieras.
- Pagos en tiendas al por menor: Pagar en cualquier establecimiento con tu cara.
- Retirada de dinero en cajeros: El usuario introduce una tarjeta de crédito/débito en los cajeros automáticos para hacer una retirada de dinero. Gracias a la biometría facial, Se identifica con su cara en los bancos y valida su identidad.
SmileID, como una solución de biometría facial
Nuestra solución, SmileID, tiene una experiencia de usuario exclusiva con un funcionamiento de estrategia omnicanal y se puede utilizar desde cualquier dispositivo que contenga cámara.
Ofrece una garantía adicional frente a otros sistemas de autenticación, ya que asegura que la persona es quien dice ser, al estar respaldada por nuestra tecnología VideoID de video identificación.
Hay dos opciones:
- Si se conoce al cliente: no existen fricciones durante el registro, lo que hace que el proceso sea más rápido y eficaz.
- Si es un nuevo usuario: debe registrarse en segundos con VideoID, y ya podrá, a continuación, realizar cualquier operación simplemente mostrando el rostro.
El proceso para los clientes resulta dinámico y eficaz, ya que se trata de un servicio de reconocimiento facial automático, sencillo, accesible y sin fricciones, con el que realizar pagos en cuestión de segundos, con una mayor comodidad y fiabilidad, siendo en la actualidad un proceso disruptivo en el mercado.
Conclusión
En definitiva, la biometría facial se está convirtiendo en una realidad tecnológica de gran impacto en nuestra sociedad.
Un producto novedoso y disruptivo que garantiza una plena seguridad y satisfacción a los clientes siempre que se cumplan las exigencias regulatorias.
Los usuarios rigen sus elecciones por las facilidades que les aporta el mundo digital, en este sentido, SmileID ha llegado para permanecer en el mundo de las nuevas tecnologías.
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